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lunes, 28 de noviembre de 2011

Aulas digitales no almacenes digitales.


El desarrollo de Internet, la creación de numerosas aplicaciones para la Web 2.0, entre otros elementos, favorecieron el auge de diversas plataformas educacionales. Estas vienen a ayudarnos a resolver uno de los grandes problemas educacionales de la actualidad: la indetenible necesidad de actualización permanente.

Una de las mayores contradicciones que se presentan en el campo de la educación superior es la existente entre el volumen de información cada vez mayor y el tiempo para procesar y transformar en conocimiento una parte de esta. Mientras la información crece exponencialmente, el tiempo no lo puede hacer. Las carreras universitarias, aun cuando reduzcan en tiempo, lo que están haciendo es traspasar a otros la responsabilidad de formar a los estudiantes. 

En los últimos años se viene produciendo un crecimiento de los llamados cursos en línea o virtuales, como consecuencia directa de la necesidad de superación permanente. Por supuesto que estos cursos, desde una visión didáctica, se deben considerar dentro de lo que llamamos educación a distancia. La distancia es el elemento definitorio, dirigida a la separación física entre profesor y estudiante.

En la actualidad ese concepto de distancia cambió y en vez de estar conformado por la relación profesor alumno, interviene un nuevo elemento que es la dispersión de información. Esta última viene a constituirse en uno de los ejes principales de la educación a distancia.

En esta dirección es a la que deben dirigirse los cursos en línea o virtuales. Ellos organizados tanto en modalidades formal o no, deben contribuir a la preparación permanente de las personas.

Dichos cursos se ven favorecidos por una parte por el desarrollo de Internet y sus variadas aplicaciones y por otra el crecimiento de plataformas que permiten su desarrollo.  No me detendré en mencionar algunas de estas plataformas y sus ventajas, lo que dejo para futuro comentario.

Mi enfoque en este caso tiene que ver con la interpretación de lo que es un curso en línea, virtual o como le llamo aula digital. Partimos de una organización pedagógica de todos los componentes de dicho curso, tanto desde el currículo hasta la preparación de profesores y estudiantes.

En mi opinión el aula digital que es el soporte del curso, es un sistema de métodos y medios donde se produce la interacción entre profesores y estudiantes. Es decir, el aula digital se debe concebir como el principal punto de encuentro entre los componentes personales.

En ella se desarrolla, en parte el proceso de aprendizaje a un alto nivel. Los estudiantes se ponen en contacto con las informaciones necesarias, previamente seleccionadas a partir de los objetivos o competencias a desarrollar.

Los estudiantes, componente más importante del proceso pedagógico, deben estar en condiciones de procesar esa información para transformarla en conocimientos. Por ello la organización del aula es un elemento clave en todo este complejo proceso.

Muchos de los cursos que apreciamos carecen de una organización pedagógica, prima el criterio de colocar archivos en formato PDF, para su descarga y lectura posterior. Se enlazan presentaciones en Power Point diseñadas para ambientes presenciales y videos que poco contribuyen al aprendizaje. Estos últimos a veces se demoran en cargar en las pantallas de los estudiantes. Se traspasan los gastos de impresión de la universidad o colegio al estudiante.

Estamos ante la presencia de numerosas aulas digitales o virtuales que son almacenes de información, donde su selección es muy pobre, agobian al estudiante y por consiguiente el abandono de dichos cursos.

En las aulas virtuales no se puede proceder de la misma manera que en los ambientes presenciales. Los procesos de acceso a la información son diferentes, lo que determina cambios en nuestra organización. Los medios que empleamos en la actividad presencial deben ser rediseñados para los ambientes a distancia. Usar en estos cursos presentaciones en Power Point diseñadas inicialmente para acompañar la explicación del profesor es confundir al estudiante a distancia y limitarlo en su aprendizaje.

Sobre este tema hay muchos otros elementos para comentar próximamente, pero retomo la idea inicial, son aulas no almacenes de documentos digitales.

2 comentarios:

  1. Muy deacuerdo, las aulas digitales es un instrumento de interacción (docente-estudiante). MOODLE tiene varias herramientas para interactuar con los estudiantes que pena que algunos docentes y univesidades lo utilicen como un gestor de descarga.
    Sin embargo, existen docentes que saben sacarle el jugo a esta herramienta, pero lastimosamente solo algunos estudiantes sacan provecho de ello.
    Beymar
    Posdata: Gran artículo

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    1. Moodle nos proporciona las herramientas que facilitan la enseñanza a distancia y la hacen más llevaderas.

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