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lunes, 25 de junio de 2012

¿Detrás de la tecnología o con ella?


Desde abril de este año y durante 18 meses se celebra el encuentro Educared 2012 que con el título ¿Cómo debería ser la educación del siglo XXI? está concentrando interesantes discusiones en torno a los ejes hasta el momento desarrollados.

Los dos primeros ejes: “Relaciones entre educación, sociedad y trabajo” y “Tecnología y calidad educativa” permitieron confrontar criterios y opiniones diversas sobre la educación a lo largo de los diferentes debates que se suceden semanalmente.

En el debate “De la sociedad 1.0 a la sociedad 3.0: ¿escuelas 1.0 para formar estudiantes 3.0?” me pregunté por qué cuestionar a la escuela, por qué exigir a sus profesores lo que la sociedad no es capaz de lograr. En los periódicos y en los noticieros de televisión es frecuente ver el gol de un jugador, los éxitos de la modelo de turno, pero pocas veces se comenta de un profesor, de los éxitos con sus estudiantes. Por ello es que propongo cambiar la pregunta: qué debe hacer la sociedad para cambiar la escuela.

Aun recuerdo las palabras de Diego Leal cuando en su exposición en el Encuentro hizo alusión a que las escuelas se están convirtiendo en clientes de los fabricantes de tecnología, reaccionado a las presiones del entorno y a la moda de la tecnología, sin conocer a fondo las necesidades.

Esta problemática no es nueva, en los años sesenta y setenta al calor del esplendor de la tecnología educativa, muchas escuelas se llenaron de las mal llamadas máquinas de enseñar, que apretando botones y bajo un enfoque conductista pretendían lograr el aprendizaje perfecto en los estudiantes. Las máquinas quedaron en el olvido y su uso fue tan fugaz que es poco probable que alguna funcione en la actualidad.

Cuando el cine viajó de Europa a América trajo consigo no solo su magia, sino el interés comercial. En la revista "La Escuela Activa" de 1938 se denomina al cinematógrafo: "...como uno de los medios más propicios para transformar la escuela..."  y se describe como el: "... instrumento más revolucionario introducido en la educación  desde el invento de la imprenta". 

La sobrevaloración de los medios de ayer y las tecnologías de hoy no es un fenómeno nuevo. Es obra y gracia de corrientes mercantilistas que se esconden en políticas educacionales de carácter general.

La moda actual es la de dotar a los profesores de computadoras portátiles, pegarles el logotipo del gobierno y la foto del presidente o ministro de turno y engañarse mutuamente. El profesor sabe que le dará poco uso en la clase y los gobernantes tratan de no saberlo, pero lo importante es que las entregaron en actos pomposos.

Se olvidan que las escuelas carecen de condiciones para proyectar, muchas no cuentan con proyectores multimedia y fueron construidas cuando la concepción general era que el buen profesor solo requiere emplear la pizarra y el libro.

Recientemente nuestra Facultad compró varias pizarras digitales interactivas y los técnicos de la empresa vendedora fueron a capacitarnos en su uso. Lo único que aprendí en aquella sesión fue que sí esperaba a dichos técnicos para aprender su empleo, no la utilizaría jamás. Las empresas lo que le interesa es vender su producto, pero preparar a los profesores no es una idea que pase por sus administrativos.

El último de los debates de Educared 2012  y que lleva por nombre “Desafíos que debemosenfrentar ante la nueva cultura digital” cita entre uno de ellos, el papel motivador de las administraciones educativas. Muchos de los administrativos educacionales tienen poca preparación en el empleo de las Tics y aun con el deseo de mejorar su preparación, la carga burocrática a la que se enfrentan es tal que no les alcanza ni la semana de más de siete días que canta Armando Manzanero en su conocida canción, para acercarse al empleo de las Tics.

Los gastos en tecnologías y nuevos equipos siguen aumentando, pero no lo hace a la par las calificaciones de los estudiantes. Las tesis que leo a diario son perfectas obras del manejo del Crtl C y Ctrl V y en las citas bibliográficas tienen cada vez mayor espacio, sitios como Monografías y el Rincón de Vago.

Escuchamos que el libro digital es la opción a los libros de textos y estuve pensando en comprar una tableta digital para leer algún libro. Sin embargo al lado de mi computadora de escritorio tengo tres libros impresos que no logro terminar de leer, mientras que en los discos duros de la computadora conservo infinidad de libros que ni siquiera recuerdo en que carpeta están ubicados.

No niego las ventajas de las tecnologías, pero me pregunto sí es realmente necesario seguir la moda tecnológica del momento, sí urge estar detrás de la tecnología o simplemente emplear y bien la que me resulta suficiente.


Ginerés, Camila: " ¿Cómo procede la nueva pedagogía para dar mayor interés y vida a la enseñanza? "La escuela activa". Vol. 1. Agosto de 1938. Número 2. Pág. 104. Cuba. 

Video de Diego Leal en Educared 2012 http://youtu.be/yVL58C4J6C0

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