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jueves, 13 de marzo de 2025

Cuando las matemáticas se quieren interpretar al revés.


Recientemente, concluyó el proceso de admisión estudiantil en nuestra Facultad. Fue un esfuerzo enorme, casi siempre secundado por un grupo de agoreros, que llenaron de piedras un camino que debía ser llano para todos.

Los bachilleres deben tomar dos exámenes, ambos se ejecutan de manera digital, empleando o bien un sistema que tiene la propia universidad o una instalación Moodle que se ejecuta en otra facultad. El sistema de la universidad requiere cargar previamente un instalador que supuestamente garantiza la seguridad en el acceso al examen, al crear un sistema de claves para el número total de máquinas. Este sistema es válido solamente para el día del examen.

En la facultad de Humanidades se disponen de no más de 50 computadoras, distribuidas en dos laboratorios. Los equipos son obsoletos, algunos se reinician con frecuencia, en otros las pantallas después de tantos años de uso no funcionan correctamente. A esto se suma que el laboratorio más grande, donde solo están activas unas 40 máquinas, desde hace meses no le funcionan sus equipos de aire acondicionado. Es posible imaginarse que un ambiente cerrado, debido a su diseño, con máquinas que desprenden calor en su funcionamiento, no es el adecuado para realizar un examen.

En una encuesta realizada al concluir el segundo examen, se les preguntó a los bachilleres; en una semana qué tiempo empleaban una PC o portátil. Para sorpresa, solo el 24 % respondió que utiliza diariamente una computadora, el 43 % algunas veces, el 18 % muy pocas veces y el 14 % responde que nunca. Estos datos nos sitúan en una situación más compleja, pues la mayoría no tiene las habilidades mínimas para trabajar con una PC.  Nos encontramos durante los dos exámenes con estudiantes que no conocían el teclado de la computadora.

En estas situaciones se genera un mayor estrés a los estudiantes, ya que deben responder 40 preguntas en 40 minutos. La práctica demostró que, como promedio, demoraron unos 30 minutos, aunque la mayoría con muy bajos puntajes.

No es necesario ser experto en higiene escolar para comprender que tomar un examen en condiciones de calor excesivo y con estudiantes que muestran pobres habilidades para el trabajo con las computadoras es altamente negativo.

Aplicando matemáticas simples.

Para este proceso se matricularon 1218 estudiantes, que rinden dos exámenes. Los estudiantes antes de ingresar al examen deben colocar su huella dactilar para su reconocimiento. En los exámenes que realizamos en el segundo semestre del pasado año, empleando las computadoras de la facultada, nos topamos con que uno de los dos lectores no funcionó. En ese momento debían ir al laboratorio de la planta baja, tomar la huella y subir nuevamente. Por lo general el proceso de vaciar el laboratorio, tomar las huellas y esperar por que los estudiantes se acomoden en sus puestos, demora unos 70 minutos por cada grupo.  

Si tomamos en cuenta la cantidad de estudiantes y la cantidad de máquinas, da como resultado que se deben dividir en 25 grupos. Cada grupo consume 70 minutos como mínimo, eso significa que en total deberíamos trabajar unas 30 horas continúas o el equivalente a 4 días de trabajo. Todo esto sin contar con los problemas técnicos que siempre se presentan. Además, el software que emplea la universidad exige que cada día se cambie la clave, por lo que se debe cargar máquina tras máquina, lo que consume cada día tiempo extra.

Considerando ese cálculo tan sencillo, que, al ser repetido en la segunda ocasión, sería el mismo resultado, es que se decidió realizar el examen en otros ambientes. De este modo no se pierden ocho días de trabajo y de estudio por parte de los bachilleres. Este ambiente que es de la Universidad, dispone de 150 computadoras, todas en red, sin conexión a Internet y con ambientes climatizados, amplios y de fácil acceso. A este se suma que disponen de un personal especializado y dispuesto a resolver cualquier dificultad técnica que se presente.

En conclusión, suponer que es mejor perder 8 días de preparación de los estudiantes y tomar un examen en ambientes dañinos a la salud, que solo reducirlo a dos días y en locales correctamente equipados, es no saber matemáticas o jugar a seguir creando problemas donde debe existir la paz. En esta ocasión, para tranquilidad del equipo de los profesores de la Facultad, el proceso concluyó con el ingreso de más de 800 estudiantes en todas las carreras.

En el siguiente comentario explicaré sobre las clases en YouTube y el empleo de los Chatbots para la preparación de los estudiantes. 

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