domingo, 26 de octubre de 2025

De la diapositiva a la App didáctica en HTML5

En colaboración con Mercedes Leticia Sánchez Ambriz

No dejes de escuchar el pódcast, superinteresante el diálogo entre dos personas.

En mis clases de Tecnología e Innovación Educativa tomé una decisión sencilla: cambiar la lógica de “mostrar” por la de “hacer”. En lugar de presentaciones en PowerPoint, mis estudiantes diseñan pequeñas aplicaciones en HTML5 que toman en cuenta competencias y objetivos, organizan la interacción y crean cuestionarios para compartir con los demás estudiantes.

De este modo las presentaciones llenas de texto, donde el estudiante repite lo que escribió en pantalla dejan paso a exposiciones multimodales. Este giro desplaza el foco del estudiante repetidor al estudiante diseñador, lo que favorece un diálogo mediado con la inteligencia artificial que mejora ideas, contenidos y medios. La apuesta no es solo técnica, es pedagógica: más actividad cognitiva de orden superior, más evaluación auténtica, más sentido de autoría y menos dependencia de diapositivas secuenciales. Además, al construir y no solo consumir tecnología, reducimos temores y resistencias asociados a la tecnofobia, poniéndola en su justa medida y contexto crítico.

La App que sustituye a la diapositiva

Una presentación lineal optimiza la exposición, pero limita la exploración, disminuyendo el desarrollo del estudiante. Por lo general las presentaciones, están llenas de texto, sin animación, y el contenido se lee directamente. Por el contrario, una app, aunque mínima, incorpora navegación, estados, entradas del usuario, microtareas y hasta evaluaciones que convierten los contenidos en experiencias. Esto obliga a pensar en el sistema de signos del mensaje, en cómo se distribuye la información en el espacio, en el centro óptico, en el contraste y en la legibilidad real de lo que se lee y se hace, cuestiones medulares del buen diseño de medios que la vieja cultura del papelógrafo y la retrotransparencia ya enseñaba y que hoy recontextualizamos en la pantalla interactiva. Partimos del concepto de la ruta crítica en el trabajo con los medios, y todo su recorrido desde la selección hasta su empleo.

Cuando pedimos a los estudiantes que creen un video, que diseñen tarjetas de memoria, que recopilen evidencias o que construyan un flujo de decisiones, forzamos la síntesis, la jerarquía visual y la secuenciación significativa del contenido. El resultado es doble: el mensaje mejora en claridad y el aprendizaje gana en profundidad. No trasladamos el párrafo a la App, sino que convertimos la idea en procedimiento y utilidad. En este proceso, reglas clásicas del diseño siguen vigentes en digital, como atender a la legibilidad de los textos, a la longitud de línea y al equilibrio entre figura y fondo para sostener la comprensión, ahora al servicio de una tarea interactiva y no de una lectura pasiva.

Una ruta metodológica para trabajar en el aula

Existen diferentes formas de crear este tipo de App. Explicaremos como generamos una App en Gemini, a partir de una investigación profunda sobre la importancia de los medios sonoros en el proceso pedagógico. Los pasos desarrollados son los siguientes.

1-    Realizar en Gemini, una petición como esta: “Quiero realizar una investigación profunda sobre los medios sonoros en el proceso de enseñanza. Mi idea es explorar la importancia de la voz del profesor en dicho proceso, pero seguirla con el empleo de los medios sonoros, incluyendo la radio. Terminaría con la creación de pódcast con IA, desde el guion, su elaboración hasta la distribución. Qué prompt me recomiendas”: Con esta solicitud se obtiene el prompt con el que sinicia la investigación profunda y una vez concluida, Gemini da varias opciones, entre ellas crear una App (página web)

2-    El siguiente paso es permitir a Gemini, realizar la App y una vez concluida, empezamos a configurarla. Para ello agregamos videos y audios creados en NotebookLM, o en otras plataformas como YouTube. La App de Gemini permite agregar otras funciones propias, además de otras creadas con anterioridad.

3-    Se somete toda la App a múltiples pruebas de verificación y se puede mejorar el diseño, la disposición entre otras acciones. El estudiante valida, corrige y reescribe hasta alcanzar rigor y pertinencia. No es un trabajo de copiar y pegar como sucede cuando se trabaja con PowerPoint.

4-    El último paso es la exposición en clase, que puede combinarse con un cuestionario a sus compañeros, con opciones de retroalimentación.

En paralelo se atiende la dimensión emocional y ética del uso de la tecnología, incrementando la seguridad en el aprendizaje, incrementando el interés y la motivación por la asignatura. Un ejemplo de este proceso se puede estudiar en esta App creada para un curso de posgrado, donde uno de los temas es el trabajo con los medios sonoros. Otro ejemplo es el de la App: Dislexia: guía interactiva, que fue empleada por tres estudiantes para exponer sus indagaciones sobre el tema. Esta última se envió su dirección por WhatsApp para que los restantes estudiantes pudieran responder el cuestionario y devolver sus calificaciones. De este modo la App supera a las diapositivas, al lograr una interacción imposible con estas.

Finalizando.

Sustituir la presentación por una app en HTML5 no es un recurso técnico, es un cambio de rol. El estudiante deja de escuchar para construir, y el profesor deja de mostrar para acompañar el diseño de experiencias. Recuperamos los contenidos clásicos del diseño de medios, los articulamos con metas de alto nivel cognitivo y con evaluación auténtica, y sumamos la IA como catalizador del diálogo y la mejora continua. En ese sistema, el aula deja de ser una sucesión de diapositivas y se convierte en un taller de pensamiento, donde el producto digital evidencia procesos, decisiones y criterios. Esa es la verdadera innovación: cuando el medio no distrae, sino que piensa con nosotros.

 

sábado, 25 de octubre de 2025

Metodologías emergentes: un cambio de paradigma necesario en la educación latinoamericana

En colaboración con Mercedes Leticia Sánchez

Escucha el pódcast, un resumen de alta calidad y precisión

Las transformaciones tecnológicas, sociales y culturales del siglo XXI han impulsado la necesidad de repensar las prácticas pedagógicas desde perspectivas innovadoras. En este contexto, las metodologías emergentes surgen como enfoques flexibles, inclusivos y profundamente humanos que responden a los retos del aprendizaje contemporáneo. América Latina, con su diversidad cultural y desafíos estructurales, tiene una oportunidad única para adoptar estas metodologías, integrando tecnología, inteligencia artificial y saberes comunitarios en modelos educativos híbridos que promuevan equidad e innovación.

Las metodologías emergentes son estrategias pedagógicas dinámicas que se adaptan a los cambios tecnológicos, culturales y cognitivos del entorno (Adell & Castañeda, 2012). Más que nuevas técnicas, representan un cambio paradigmático hacia un aprendizaje abierto, colaborativo y orientado a la co-construcción del conocimiento. Sus características incluyen:

·         Flexibilidad: Adaptan procesos, ritmos y espacios a las necesidades de los estudiantes.

·         Interdisciplinariedad: Conectan saberes diversos para abordar problemas reales.

·         Hibridación: Integran lo presencial, virtual, analógico y digital.

·         Participación activa: Fomentan autonomía, colaboración y co-creación.

Ejemplos destacados incluyen el aprendizaje invertido, el aprendizaje basado en proyectos, el aprendizaje ubicuo y el uso de IA generativa como mediadora cognitiva (Holmes, Bialik & Fadel, 2022). Estudios de la UNESCO (2021) muestran que estas metodologías han incrementado el compromiso estudiantil en un 25-40% en entornos híbridos post-pandemia.

Relevancia para América Latina

En contextos donde la conectividad es limitada—solo el 50% de los hogares latinoamericanos tienen acceso a internet de alta velocidad (CEPAL, 2023) las metodologías emergentes priorizan la pedagogía sobre la tecnología. Estrategias como las actividades desenchufadas (Bell et al., 2018) desarrollan pensamiento computacional y creatividad sin requerir dispositivos digitales. Por ejemplo, programas piloto en Brasil y Colombia han mejorado habilidades cognitivas en un 30% entre estudiantes de comunidades rurales, según la Fundación Telefónica (2022), democratizando la educación en zonas vulnerables.

Las metodologías emergentes permiten revalorizar la identidad latinoamericana, integrando saberes locales, lenguas indígenas y prácticas comunitarias. Frente a modelos educativos globalizados, proponen una pedagogía decolonial que reconoce la diversidad cultural como fuente de conocimiento (De Sousa Santos, 2018). En México y Perú, currículos que incorporan saberes indígenas han reducido la deserción escolar en un 15-20% (INEE, 2024), demostrando el impacto de enfoques situados.

Estas metodologías transforman al docente en un diseñador de experiencias y al estudiante en un constructor activo del conocimiento. Como afirmó Freire (1997), “enseñar no es transferir conocimiento, sino crear las posibilidades para su producción”. Encuestas regionales indican que docentes capacitados en estas metodologías reportan un 35% más de satisfacción laboral, mientras que los estudiantes desarrollan mayor autonomía (OECD, 2023).

La IA como copiloto pedagógico

La inteligencia artificial potencia las metodologías emergentes al:

·         Personalizar itinerarios de aprendizaje según necesidades individuales.

·         Generar materiales adaptados a contextos culturales y lingüísticos.

·         Apoyar a docentes en retroalimentación y planificación.

·         Fomentar la metacognición mediante diálogos con agentes inteligentes.

Sin embargo, su implementación debe ser desde la ética, abordando riesgos como sesgos algorítmicos que podrían marginar comunidades indígenas o perpetuar desigualdades (World Bank, 2024). Por ejemplo, sistemas de IA mal diseñados podrían priorizar lenguas dominantes, ignorando lenguas como el quechua o el guaraní. García Aretio (2023) subraya que el docente, como mediador ético, sigue siendo central, utilizando la IA como un “copiloto” que amplifica, no sustituye, la interacción humana.

Adoptar metodologías emergentes implica reimaginar la rica tradición pedagógica latinoamericana—basada en la comunidad, la oralidad y la cooperación—en diálogo con la tecnología. Proponemos una estructura Híbrido Decolonial Latinoamericano (MHDL), un marco que combina saberes tradicionales con herramientas digitales, evaluando impacto cultural (e.g., preservación de lenguas) y tecnológico (e.g., competencias digitales). Esta estructura debe aprovecha la IA para enriquecer narrativas culturales, como en proyectos andinos que integran relatos orales con herramientas digitales.

Un caso ejemplar es el proyecto Storyboard.IA, implementado en la escuela primaria indígena de la sierra de Hidalgo, México, donde se habla náhuatl. En esta iniciativa, niños de 10 a 11 años desarrollan competencias de escritura en español, narrando anécdotas que reflejan tradiciones y lugares de su comunidad, con el apoyo de herramientas de inteligencia artificial.

Este proyecto integra tecnología con identidad cultural al permitir que los estudiantes puedan crear diarios en forma de cuentos, adaptados a formatos digitales accesibles, que preservan elementos culturales como festividades y narrativas indígenas.

Uno de los Stroyboard del proyecto puede ser escuchado en español desde este enlace

A modo de conclusión

Las metodologías emergentes ofrecen una respuesta pertinente para los sistemas educativos latinoamericanos, promoviendo equidad, innovación y pertinencia cultural. Su implementación requiere:

·         Diseñar experiencias, no solo contenidos: Cambiar el enfoque hacia aprendizajes significativos.

·         Adaptar a contextos reales: Incorporar diversidad cultural y lingüística en las estrategias.

·         Usar la IA éticamente: Establecer protocolos para mitigar sesgos y garantizar inclusión.

·         Fomentar la agencia: Posicionar a docentes y estudiantes como protagonistas del cambio.

El desafío es humano y cultural: formar ciudadanos críticos, creativos y empáticos que integren la IA sin perder la inteligencia emocional. América Latina, con su riqueza cultural, puede liderar esta transformación, convirtiendo limitaciones en motores de innovación pedagógica.

(nota: este trabajo es un resumen del proyecto “StoryBook Rural: Potenciando la escritura creativa en niños de 10-11 años”)

Referencias

·         Adell, J., & Castañeda, L. (2012). Tecnologías emergentes, ¿pedagogías emergentes? En J. Hernández, M. Pennesi, D. Sobrino & A. Vázquez (Eds.), Experiencias educativas en las aulas del siglo XXI (pp. 13–32). Universidad de Murcia.

·         Bell, T., Witten, I. H., & Fellows, M. (2018). Computer Science Unplugged: Teaching CS without a Computer. CS Unplugged Project.

·         CEPAL. (2023). La brecha digital en América Latina. Comisión Económica para América Latina y el Caribe.

·         De Sousa Santos, B. (2018). Epistemologies of the South: Justice Against Epistemicide. Routledge.

·         Freire, P. (1997). Pedagogía de la autonomía: Saberes necesarios para la práctica educativa. Siglo XXI Editores.

·         Fundación Telefónica. (2022). Innovación educativa en Latinoamérica: Reporte anual.

·         García Aretio, L. (2023). Modelos híbridos en educación: de la emergencia a la consolidación. Revista Iberoamericana de Educación a Distancia, 26(2), 9–35.

·         Holmes, W., Bialik, M., & Fadel, C. (2022). Artificial Intelligence in Education: Promises and Implications for Teaching and Learning. Center for Curriculum Redesign.

·         INEE. (2024). Evaluación de programas educativos indígenas. Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación.

·         INEGI. (2024). Impacto de herramientas digitales en educación rural. Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

·         OECD. (2023). Teaching and Learning International Survey (TALIS).

·         UNESCO. (2021). Reimagining our futures together: A new social contract for education.

·         World Bank. (2024). AI and Education in Developing Regions: Opportunities and Risks.