jueves, 24 de noviembre de 2011

Ni nativos, ni inmigrantes digitales: profesores de este tiempo.


En diciembre se cumplen diez años desde que Marc Prensky publicó en la revista “On the Horizon” su famoso artículo “Nativos digitales, inmigrantes digitales”. En aquel artículo señaló que los estudiantes actuales han cambiado sustancialmente, no solo de apariencia sino que piensan y procesan la información de manera diferente a sus predecesores. Por ello se requiere que los maestros actuales cambiemos, que nos adaptemos a esta nueva forma de pensar, de ir más rápido.

En estos 10 años, me pregunto: qué cambió en la escuela, qué cambió en los maestros y qué cambios experimentaron los estudiantes. Esta es una de esas preguntas que en cualquier acto, congreso, debate o encuentro de profesores se discute con enorme pasión, pero con pocas respuestas aceptables. 

La escuela cambió, desde las viejas máquinas Pentium 1 pasamos a las Dual Core, de los monitores enormes a los de pantallas planas y los profesores empezamos a cambiar los libros que llevábamos en nuestro maletín por una pesada portátil o una ligera netbook. Empezamos a emplear celulares inteligentes y a discutir cuál es el mejor modelo. 

La escuela se modernizó, quitó cables por conexiones WiFi, cambió pizarras verdes por blancas y ahora por digitales. Empezamos a sustituir los libros impresos por las pantallas  y comentamos casi a diario que vivimos en tiempos de modernización.

La escuela se endeudó, los presupuestos son para comprar equipos, pero no para arreglar las aulas. Una PDI puede pasarse meses para que se le cambie un cable que cuesta menos que cinco Coca Colas de dos litros. 

A los profesores nos exigen cada día más, nos piden que seamos docentes 2.0 pues nuestros alumnos, que son los nativos digitales nos van a superar, nos dejaran atrás. Hasta ahora, diez años después de aquel artículo, seguimos esperando a esos nativos digitales. 

No nos aumentaron el salario, es más en no pocos países de la región lo congelaron,  mientras que todo a nuestro alrededor aumenta de precio. Pagamos Internet, la computadora personal, el celular pero nunca una telefónica, que deben ser inmigrantes digitales, se nos acercó para compensar la devaluación de nuestro salario. Sí no pagas Internet te la cortan así de fácil. Ellos de inmigrantes digitales no tienen un pelo, pero si hacen todo su esfuerzo para decirnos que vamos detrás. 

Nuestros estudiantes, los supuestos nativos digitales, llegaron a las escuelas y universidades, pero ni los dejamos cambiar, ni tampoco ellos hicieron mucho para que nosotros cambiemos. Seguimos con el estudiante de menos es mejor, donde copiar y pegar es una habilidad eterna, pero revestida del componente moderno. 

Le cambiamos el nombre a los currículos escolares, antes redactábamos objetivos, hoy competencias. Nos reinventamos mil formas para cambiar, pero seguimos en las mismas de siempre. 

La escuela y la universidad se sigue debatiendo entre el incremento de tecnologías o preparar a los profesores para su uso. Este debate no es reciente, es perpetuo desde los albores de la Tecnología educativa en los años 60 del pasado siglo. 

No se trata de copar la escuela con medios, sino de cómo usarlos. En otras palabras los profesores debemos ser preparados en la vinculación del método con el medio, contrariamente en cómo sucede que se nos enseña a usar el medio, pero no la razón de su empleo.  

En nuestras instituciones educacionales faltan investigaciones sobre estos métodos, pero sobran medios.  Se usan las presentaciones en Power Point como lupas agrandando el texto en Word, las PDI son simplemente proyectores de presentaciones y videos.

En diez años cambiamos, no lo niego, pero me resisto a que me llamen inmigrante digital, como sí solo el hecho de nacer en una época nos dotara de las habilidades necesarias para ir más rápido con la tecnología. 

Me niego a entender que mis alumnos son nativos, solo por nacer después de los años 80.

Soy y seré simplemente un profesor de esta época, ni inmigrante, ni nativo digital.

6 comentarios:

  1. Creo que esta entrada denota el famoso miedo del profesorado al cambio de un sistema educativo clasista, basado en una educación de la época industrial en el cual el conocimiento se pasaba de forma oral.

    No se trata de introducir ordenadores de última generación, ni tener un iPhone 4S antes de que salga al mercado, lo que debemos pensar es un cambio de paradigma donde memorizar es necesario SI, pero no es la parte más importante.

    Cuántas veces un examen de matemáticas es más un examen de precisión, al más estilo operación de vida o muerte, que una demostración de conocimientos?

    ¿Cuántos profesores usan los mismos ejercicios año tras año?

    Entramos en una era digitalizada, donde cobra importancia el saber buscar información y contrastarla, "Copiar y Pegar" es lo que se ha hecho siempre, antes usando enciclopedias y hoy Internet. ¿Es que realmente necesario escribir a mano algo que ya otra persona ha escrito en un libro?

    Lo de ser nativo digital o no, es una etiqueta más por nacer en un momento donde la tecnología está al alcance de cualquier persona, de no conocer un mundo sin móviles y sin Internet.

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  2. Esta vez disiento Carlos,
    Personalmente no me siento agredida por la clasificación entre nativos e inmigrantes digitales, pienso que es simplemente un constructo teórico para caracterizar a dos grupos poblacionales de acuerdo a la variable momento de apropiación de la tecnología.
    Que tenemos que ser profesores de la época? Cierto, pero eso es y fue así en todos los tiempos y el analizar esta característica innegable es un elemento que nos ayuda a comprender precisamente las múltiples condiciones que tenemos que tomar en cuenta para hacer una educación adecuada a nuestro tiempo.

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  3. Estimada Rosario

    Disentir es un buen ejercicio para el conocimiento y para el desarrollo de la ciencia. Tampoco me siento agredido por el calificativo, si me siento agredido cuando no podemos cambiar el cable de una PDI, cuando los profesores siempre andan con la afirmación que no tienen tiempo, que no les enseñaron, esas sí son agresiones.
    Saludos

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  4. Cheo
    Tocas la esencia del problema, no es el medio, es el método el que debemos aprender, el que debemos discutir, el que debemos cuestionar. Pero eso es tan viejo que viene desde la época de Comenio y mucho antes. Nos cuesta mucho cambiar..

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  5. Creo que no tengo nada que agregar... tal vez solo resaltar la frase con la que más me identifiqué: "No se trata de copar la escuela con medios, sino de cómo usarlos".

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  6. Muy buena reflexión, hace diez años, me asusté, pero cuanta razón tiene tu post, ahora trabajo más con el mismo salario, pero muy contenta porque estoy en este tiempo, esperando que mis nativos me impresionen¡¡¡¡

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